miércoles, 29 de febrero de 2012

Banca ética...


Antes de comenzar la crisis veíamos a los bancos como un elemento más de nuestra sociedad. Están ahí desde hace siglos, guardando, custodiando, usando nuestro dinero para generar beneficios para todos, aunque especialmente para ellos. Como no había crisis, los bancos nos daban, bueno, nos prestaban dinero (un banco no da nada a nadie sin esperar algo a cambio), para poder llevar a cabo nuestros planes de comprar una casa, un coche, hacer un viaje.... Con palabras amables nos invitaban a hablar con ellos, a contarles nuestros sueños, parecían más un genio mágico que un ente financiero.

Sin embargo, la crisis ha destapado, algunos ya lo habían visto, la cara más dura e inmisericorde de la banca. Desahucios, embargos, ahorros perdidos, mucha gente arruinada es el reguero de sufrimiento y dolor que esa banca "amiga" está sembrando a nuestro alrededor.

Está más que claro que el dinero es un elemento que, a pesar de ser "necesario", no deja de ser  peligroso y que, con más frecuencia de lo deseado, es origen de muchos problemas. Pero, frente a tener nuestro dinero en bancos que, sin escrúpulos, buscan el beneficio deshumanizado, podemos tener nuestro capital en la opción de la banca ética.

La banca ética, nacida hace unas décadas, resume al conjunto de entidades financieras cuyos productos no están esclavizados por el máximo beneficio y la especulación sino que invierten en economía real, es decir, que invierte en actividades que existen realmente, y no en economía financiera que es ficticia y especulativa. Además, la banca ética, y de ahí su nombre, se rige por un comité objetivo e independiente que establece los criterios de inversión. No cabe la explotación infantil, la discriminación de género, la destrucción del medio ambiente, el comercio de armas... entre las actividades donde la banca ética invierte el dinero.

Hoy por hoy, la banca ética es una opción para no ser cómplice de esa otra banca a la que no le tiembla el pulso a la hora de ejecutar un embargo, o que no acepta opciones como la dación (posibilidad de dar la casa como pago de la hipoteca y evitar un desahucio). Si creemos que otro mundo es posible, también otra banca es posible.

La opción por la que he optado es Triodos Bank. Os invito a conocer esta posibilidad para que, al menos, parte de nuestro dinero no esté teñido de injusticia y sufrimiento.

Hasta la próxima, suerte y bendiciones.

3 comentarios:

Elena dijo...

Hola, amigo. Muy bonita aportación en los tiempos que corren. Ya sabía por mi hermana (ya sabes que se ha dado al huerto urbano) de todas estas cosas. Ahora hay que vencer lapereza de hacer los trámites para el cambio. Un beso atodos.

Laura dijo...

Hola,
Siento ser crítica, pero a mi Triodos Bank no me parece del todo ético. Me preocupan muchísimo sus inversiones en centros de menores privados, en lso que ha habido muertes malos tratos y, sobre todo, no considero un negocio ético ni sostenible. Aquí hay más información:
http://actuable.es/peticiones/exige-triodos-bank-deje-financiar-entidades-vinculadas

De todas maneras, creo que el debate que planteas es muy interesante, y dentro de no mucho habrá opciones realmente éticas con todos los servicios, como FIARE. Mientras tanto, yo apuesto por las cooperativas de crédito
como Caja Laboral o Multicaja. Seguro que también tienen alguna inversión chunga, pero parecen más sinceras.

¡¡Saludos!!

Antonio ST dijo...

Laura, desconocía esta información de Triodos Bank. De ser cierta es lamentable. Sin embargo, creo que el debate no acaba con esta supuesta actuación del banco. Sigo pensando que otra banca es posible y animo a todos a ir por este camino. Que cada lo recorra en compañía de la entidad que más le convenza. Saludos.