sábado, 31 de diciembre de 2011

El año que se va...y el que viene...

Hoy, 31 de diciembre, lo lógico y seguramente esperado es que "Dímelo en el blog" escribiera un post para despedir el año 2011 y dar la bienvenida al 2012 con buenos deseos, estupendas intenciones y muchos, muchos deseos de paz, felicidad y prosperidad. Sea pues así, tal y como lo esperan sus queridos lectores y seguidores. 

Son estos días cercanos al final del año muy dados a mirar hacia atrás, a hacer balance de como han transcurrido los meses, de hacer memoria personal y colectiva de los acontecimientos más significativos y determinantes del año que se agota. Ha habido de todo y para todos. Los más optimistas dirán que el 2011 trajo cosas buenas y los menos positivos opinarán que el año que acaba, mejor ni mentarlo y que ojalá el 2012 sea diferente.

No me alineo ni con unos ni con otros. Creo que vivimos los años de forma subjetiva, de manera personal e intransferible y, que según con la actitud con que los vivamos, así los evaluaremos. 

Si de mirar hacia atrás se trata, para despedir el 2011 me voy a quedar con la imagen del bar "La Colonial" en la Alameda de Cádiz hace dos días en un paseo en bici al caer la tarde. Conocí el lugar hace muchos años ya. Fue testigo de muchas vivencias importantes, siempre me acogió de día y de  noche con mucho cariño y complicidad. Tanto su terraza en verano como su interior en invierno fueron testigos de mucha felicidad, por eso, cuando aún lo veo abierto casi 20 años después, me parece que todo puede tener un futuro.

Y si de mirar hacia adelante se trata, también creo que solo el futuro será mejor si afrontamos la vida con buen humor, con ilusión por ser mejores, con honradez y ayudándonos unos a otros sin esperar nada a cambio, viviendo más sencillamente y disfrutando de las cosas sencillas.

No me alargo más o el momento de tomar las uvas me pillará escribiendo esta entrada. Para recibir el año, os dejo un video, que aunque ya rula por las redes sociales, no por verlo muchas veces deja de enseñarnos valores positivos. Su banda sonora es la canción es "One day" de Matisyahu, su letra no tiene desperdicio.


Feliz 2012,  mucha suerte y muchas bendiciones para todos.

viernes, 23 de diciembre de 2011

Feliz Navidad...!


Queridos amigos y seguidores del blog, quiero desearos a todos una muy muy FELIZ NAVIDAD. Celebramos el nacimiento de Jesús y somos llamados a hacerle un hueco en nuestro corazón y en nuestra vida. Jesús es Luz y viene a quedarse con nosotros y, día a día, iluminar el camino de nuestra vida. Que su mensaje de amor, justicia y paz llegue a todos y colme de felicidad al mundo.

Para animar estas fiestas, os dejo el villancico que Migueli nos ha regalado para esta Navidad. Está cantando por niños y tiene una música y una letra fresquita y cercana.

 

Que la alegría de la Navidad la mantengamos viva todo el año.

Hasta la próxima, suerte y bendiciones.

domingo, 18 de diciembre de 2011

De Galilea a Judea...


En este cuarto domingo de Adviento, María ha ido a visitar a su prima Isabel. María ha cogido la puerta, como se dice por aquí, y se ha ido a casa de su anciana prima a echarle una mano. Desde Nazaret a Judea hay un trecho, más de cien kilómetros. Para una mujer joven son muchos kilómetros para hacerlo sola y por un camino montañoso que, en aquellos tiempos, estaba lleno de peligros. Tardaría, además varios días, con lo que tendría que hacer noche en el camino. No sabemos si durmió en alguna posada o tuvo que hacerlo a la interperie, pues María no era rica. Toda una aventura para una mujer que ya estaba embarazada.

Lucas, el autor del relato, nos presenta a María como una persona valiente y generosa, que deja la seguridad de su hogar y, no duda en salir, en ayuda de quien la necesita. Dice el texto que "apresuradamente", es decir, no se lo pensó dos veces. María está embarazada, su hijo Jesús aún no ha nacido pero ya, desde dentro empieza a irradiar amor, servicio y entrega.

De Galilea, tierra de gentiles, a Judea, región santa, donde Jerusalén sobresale con su Templo, llegan María y Jesús para llenar de alegría la vida de los demás. Isabel y su hijo serán los primeros en recibir la buena noticia que María y Jesús van sembrando por donde van. Es curioso que lo que el mundo establecido y poderoso ignora y margina: dos mujeres embarazadas, Lucas lo presenta como ejemplo de Dios para decirnos que, en lo sencillo y en lo cotidiano, está el camino verdadero. Escena de mujeres abiertas a la solidaridad y a la confianza. Isabel reconoce en María la presencia de Dios. No es una intuición, es una certeza. Es la alegría de Jesús la que lo llena todo. Es la alegría la que todo lo envuelve, no podía ser menos.

Y María, nada más llegar recita el Magnificat, que nos habla de un proceso de inversión, de una promesa que lo trastoca todo, de una alabanza llena de fuerza de Dios. El Magnificat nos dice, que, desde la misericordia y la bondad, Dios hará que los pobres dejen de serlo, que los hambrientos sacien su hambre y que el mundo se ordene de forma más humana y más justa.

María se quedó allí tres meses, lejos de José, su prometido, sirviendo a una anciana embarazada, hasta que volvió a Nazaret. Otra vez de vuelta, otra vez por los caminos peligrosos. El relato no tiene desperdicio. La contemplación de esta escena nos anuncia que el Niño que viene, el que viaja en el seno de María, tiene una misión que ya es anunciada en el Magnificat. Cuando nazca comenzará un nuevo tiempo ¿estamos dispuestos a vivirlo?

Hasta la próxima, suerte y bendiciones.

Entrada inspirada en Lc, 1, 39-56.

martes, 29 de noviembre de 2011

Expectativas...


Hace unas cuantas semanas que, en los estantes de los supermercados, aparecen expuestos los típicos productos de Navidad. Un poco más tarde aparecieron los adornos de las mismas fiestas y, a los dulces y adornos, se ha unido la televisión con su clásico "bombardeo" de publicidad de perfumes, juguetes y demás... Pronto, igualmente, empezarán a llegarnos los mensajes y felicitaciones cargados de deseos de amor, felicidad, salud... Me parece bien que nos felicitemos, que nos deseemos buenas nuevas para todos, al fin y al cabo ¿qué otra cosa nos deberíamos desear si no es el bien y la felicidad?

Sin embargo, cuando veo tanto deseo de pasarlo bien, tantas imágenes de familias unidas, de amigos celebrando fiestas, a personas bien vestidas brindando con champán, de gente recibiendo regalos carísimos y brillantísimos, no puedo dejar de pensar en aquellos que pondrán en la fiesta de la Navidad, o mejor dicho, en esa falsa imagen de la Navidad, todas sus expectativas de felicidad.

La RAE define "expectativa" como la esperanza de realizar o conseguir algo. Está bien tener esperanzas de que el futuro nos depare algo bueno o mejor, sin embargo, si desmesuramos nuestras esperanzas en algo o en alguien, podemos correr el riesgo de que, si no se cumplen, nos podemos sentir tan defraudados que nos haga mucho daño.

En el caso que nos ocupa, pienso en los que esperan de la Navidad, por un lado, fiestas, regalos, diversión y por otro, los que anhelan compañía de familia o amigos, y al final no tendrán ni uno ni otro. Esperar de la Navidad un milagro mágico es esperar en vano. Celebrar la Navidad es otra cosa, pero se le ha cubierto de tantos añadidos erróneos que, al final, más que ser una gozosa noticia para muchos es una pesadilla.

Cuidado con las expectativas, cuidado con magnificar lo que no es, por que al final lo que esperamos que nos haga feliz, quizás tenga el efecto contrario.

Hasta la próxima, suerte y bendiciones.

sábado, 26 de noviembre de 2011

Trabajamos por la justicia...

Nunca me ha gustado el uso peyorativo que de la palabra "caridad" se hace en la actualidad. Se la contrapone a la palabra moderna llamada solidaridad. La primera se suele identificar con un tipo de ayuda asistencialista vinculado a personas religiosas anticuadas y la segunda con la ayuda a los demás bien hecha. Y creo que ninguna de las dos posturas son correctas al cien por cien.
En el libro "Sonrisas de Bombay" que he leído recientemente, el autor contrapone la práctica solidaria de su ONG a la palabra caridad que desarrollan otras instituciones en la India. Su solidaridad la define como promoción, como educación, como el famoso adagio chino "dar la caña y no el pez", frente a la caridad de darlo todo hecho, de "dar de comer", simplemente y adormecer las potencialidades que todo ser humano tiene. Me molestó dicho planteamiento, no me parece justo definirse desmereciendo a otros y menos si el planteamiento no es correcto.
Por mis creencias y mi profesión tengo otra idea y otra experiencia de la palabra caridad. Desde que Jesús de Nazaret salió por los caminos de Galilea, liberando a aquellos con los que se cruzaba por los caminos de Israel, hasta la actualidad, una gran corriente de caridad ha llenado el mundo. Es verdad que, en muchos casos, los hombres hemos desdibujado el verdadero sentido de la caridad evangélica que no es otra que amor más justicia. El amor sin justicia y la justicia sin amor, no tienen, cabida en la palabra caridad. Y por eso cuando le hemos quitado al amor la justicia, el resultado ha sido un grave asistencialismo que ha enpequeñecido el mensaje evangélico y ha hecho flaco favor a los hombres y mujeres que han necesitado ayuda alguna vez, y cuando le hemos quitado el amor a la justicia la práctica ha podido volverse fría y sin corazon, con el riesgo de caer en el juicio y la condena.
Cáritas, la institución donde trabajo, tiene como lema: "Trabajamos por la justicia". Esto conlleva una labor a favor de los colectivos más desfavorecidos de la sociedad que tiene en su trabajo una tarea implícita de denuncia de las causas que han originado la injusticia de la pobreza y la exclusión. No solo buscamos actuar sobre las consecuencias sino también sobre las causas que la han originado para que no vuelvan a suceder más.
Es verdad que, como realidad humana, a veces hemos actuado más en el sentido peyorativo de la palabra caridad que he mencionado más arriba, y quizás hemos contribuido a su mala acepción, pero en los últimos años se ha hecho un gran esfuerzo para que la caridad sea amor más justicia y no un pálido reflejo de lo que tiene que ser.
En Cáritas damos, nos gusta dar la caña y no el pez, pero si hay que dar el pez, los damos y luego damos la caña pero también buscamos un lugar en la orilla para que la persona pueda pescar y aún vamos más allá, trabajamos para que haya peces en el mar.
Nuestra práctica se remonta a lo que Jesús hacía con los pobres y enfermos, los miraba a los ojos, los tocaba aún siendo leprosos o impuros, los tomaba de la mano y los levantaba, los ponía en pie, los volvía al camino, los sanaba y luego los dejaba marchar, no les pedía nada a cambio, no les obligaba a seguirlo, eran libres de su esclavitud y libres para ir donde quisieran.
Creo que la palabra solidaridad quiere significar lo mismo que caridad: ponerse al lado de los que necesitan ayuda, con, junto y para ellos, dándose de forma desinteresada y buscando el bien integral del otro, sin manipulación, proselitismo, imposición, compartiendo lo que se es y lo que se tiene. Enfrentar una a la otra no me parece correcto, pues confunde y divide y eso está en contra de ambas palabras. Y no es justo además presentar alguna acción a favor de los otros bajo la palabra solidaridad simplemente para hacerla parecer moderna. Cada uno es lo que es y no debemos definirnos a costa de los demás.
Bueno, creo que me he enrollado más que en ninguna otra entrada anterior. Será que me tira el tema.
Hasta la próxima, suerte y bendiciones.

sábado, 19 de noviembre de 2011

Elecciones...


Mañana, 20 de noviembre, los españoles estamos llamados a ejercer nuestro derecho al voto para designar quiénes nos gobernarán en los próximos cuatro años, a elegir a los políticos que tendrán al país entre sus manos. Son las elecciones generales, con mayúsculas. Se juega en ellas el destino de un país, de millones de personas. No es para tomarlo a broma. Cada uno que vote conciencia o que no lo haga, es lo grande de la democracia, la libertad de elegir. Como hoy es día de reflexión, me abstengo de inclinarme hacia un lado o hacia otro.

Las elecciones generales son la respuesta a la espera de todo un país. Ciudadanos de nuestros pueblos y ciudades esperan que, de las elecciones generales, salga lo mejor para sus vidas, para la de sus familias, de sus amigos, vecinos, compañeros de trabajo. Personas como tú y como yo, esperan de las elecciones generales que el futuro se escriba en un lenguaje que todos puedan entender, que el futuro tenga un color que a todos guste, un lenguaje y un color que permita la mejora y el avance de nuestra sociedad.

Ahora bien, estas elecciones se celebran cada cuatro años, pero en la vida hay otras elecciones que se producen a cada momento, a cada instante. De esas elecciones se habla poco, no tienen una campaña previa y las podemos ejercer sin tener que esperar a que nos pongan una cabina, una urna y unas papeletas secretas. De estas elecciones personales y particulares hay otros que también están esperando. De tu elección de comprar en una tienda de comercio justo, esperan niños en los países del sur para poder ir a la escuela en lugar de trabajar; de tu elección de implicarte en un voluntariado social, esperan tu visita ancianos en soledad; de tu elección de no correr por la carretera o no beber si conduces, espera tu familia verte volver a casa; de tu elección de ser más tolerante y acogedor, esperan muchos extranjeros para sentirse en nuestro país como en su propia casa; de tu elección de... podría seguir enumerando elecciones, pero cada uno de mis lectores sabe cuál tiene que hacer.

Elecciones generales, elecciones particulares, ambas cambian vidas, ambas cambian mundos. Elige.

Hasta la próxima, suerte y bendiciones...

lunes, 31 de octubre de 2011

Andresín, Dondalín y Fideín...

Mi sobrino Andrés cumple hoy su primer lustro de vida. Es un tópico decir que "parece que fue ayer cuando vino al mundo" por que el tiempo corre muy deprisa, pero no fue ayer sino hace exactamente cinco años ya. Como ya escribimos en este blog, "nada de tiempo, toda una vida".

Andresito celebró el viernes pasado su cumpleaños con sus amigos de "cole" y, este año, ha decidido invitar también a dos amigos muy especiales, a Dondalín y a Fideín, dos payasos muy traviesos que han hecho las delicias de sus amiguitos. En realidad, estos simpáticos y divertidos personajes han hecho las delicias de sus amiguitos y de sus padres pues, en esa fiesta, han participado y disfrutado todos.

En su fiesta, Andresito se lo pasó en grande. Con su carácter divertido no paró de jugar, bailar, soplar velas y recibir los bonitos regalos que le hicieron sus amigos. En el vídeo podéis comprobar que es cierto lo que cuento.



Andrés, desde este blog te deseamos muchas felicidades y que pases un día estupendo de tu cumpleaños. Que sigas creciendo y que celebremos muchos muchos cumpleaños juntos.

Hasta la próxima, suerte y bendiciones.

martes, 25 de octubre de 2011

Feliz cumpleaños...


Hace muchos muchos años, en una galaxia muy muy cercana, nuestros caminos se cruzaron. Desde entonces, casi no se han separado, y gracias a la vida, hemos compartido muchas cosas juntos. Esta entrada es un pequeño homenaje por su cuarenta cumpleaños.

Cuando le conocí, Juan Antonio era un joven alegre, estudioso, responsable, servicial. Lo sigue siendo, ya lo dice el refrán: "genio y figura...". No nos costó ningún trabajo conectar y congeniar. Compartimos la fe y eso es una garantía para que la amistad dure, pero también compartimos el gusto por la música, los viajes, los paseos, las cervecitas... Parte de nuestra juventud la pasamos compartiendo trabajos en la comunidad parroquial, donde vivimos nuestra fe y muchas experiencias que nos hicieron crecer y madurar. Fueron días tan plenos que siempre están en nuestro recuerdo.

Los años han ido pasando. Llegaron los trabajos, las parejas, los hijos. Nada es igual, pero, gracias a Dios, la amistad permanece y se ha enriquecido gracias a ellos.

¡Feliz cumpleaños, amigo Juan Antonio! Bienvenido a los cuarenta... que cumplas muchos más y que lo podamos celebrar juntos durante muchos años.

Hasta la próxima, suerte y bendiciones.

miércoles, 19 de octubre de 2011

Tierras imperecederas...


J.R.R. Tolkien creó al escribir "El Señor de los Anillos" una de las más bellas metáforas de la historia de los hombres. Entre lo mítico y lo histórico, con seres reales e imaginarios, Tolkien nos muestra lo mejor y lo peor de la humanidad. De entre la multitud de personajes que aparecen en la novela, Tolkien eligió como protagonista a un ser pequeño, sencillo, humilde, pacífico, inteligente y bondadoso. Para ejemplarizar a los hombres, Tolkien eligió a Frodo Bolson de la raza de los hobbits, seres de pequeña estatura que habitaban en La Comarca, en sorprendente armonía y convivencia.

Cuando Frodo Bolsom heredó de su tío Bilbo el "anillo único" no era consciente de que recibió un objeto que simbolizaba el mal y que su posesión le convertía en destinatario de una misión que le costaría la vida: destruir el anillo para salvar su mundo conocido. Muchos a lo largo de los siglos, habían deseado poseer el anillo de poder, pero pocos lo habían logrado y los que lo alcanzaron fueron corrompidos por él. Hasta el mismo Frodo, alma pura y bondadosa, sintió la tentación del anillo.

La misión de Frodo fue destruir el anillo, representación del mal con mayúscula y origen de todo aquello que provoca daño al ser humano y a la naturaleza. Acompañado de amigos, aliado de otros que buscan el bien y la libertad de los pueblos, Frodo avanza entre pérdidas y peligros hacia el encuentro final con el poderoso Señor del Mal. Hasta el último momento, el anillo quiere corromper el buen corazón de Frodo, y es, gracias a su gran amigo Sam, que la misión puede completarse con éxito. Sin embargo, aunque el anillo fue destruido, Frodo no vivirá para envejecer. En su viaje fue herido por una espada envenenada y, al tiempo de completar su misión, Frodo debe partir hacia las Tierras Imperecederas, lugar que simboliza la vida tras la muerte.

Tolkien, profundamente religioso, tiñó su obra de muchos paralelismos de su fe católica. Jesús de Nazaret también fue una persona proveniente de un pueblo sencillo, tenía un carácter pacífico, humilde y bondadoso. En su madurez se rodeó de amigos y seguidores para llevar a cabo la misión concreta de construir un reino de justicia, amor y paz. Para ello tuvo que enfrentarse a los poderes de su época, a los ricos y a los sacerdotes, al mal y a la injusticia. Y en el empeño no llegó a viejo. Sin embargo, su muerte no fue el final. De un modo o de otro, Tolkien encontró en las Tierra Imperecederas una metáfora de la resurrección de Jesús.

De una forma o de otra, todos estamos llamados a una llevar adelante una misión en la vida. Cada uno tiene la suya, bien la descubres o bien te la encomiendan. La grandeza está en aceptarla y no desfallecer. En el camino encontraremos amigos y aliados, también dificultades y obstáculos. Nadie nos ha dicho que será fácil, pero, al final, si tenemos corazón sencillo, humilde, pacífico y bondadoso, al final, las Tierras Imperecederas estarán ahí, esperándonos.

Hasta la próxima, suerte y bendiciones.

domingo, 2 de octubre de 2011

De otoños, baños y mangas...


El viento de levante no ha querido dejar de probar como es Cádiz en otoño y, desde hace más de una semana, se ha establecido por estos lares para deleite de pocos y fastidio de muchos. La playa que, aún en estas fechas en Cádiz, es una opción estupenda, está desierta, mejor dicho parece el desierto, por la pocas personas que se aventuran en ella y por las nubes de arena volando por doquier. Sin embargo, Cádiz es "perra vieja" y, si el levante no deja a sus hijos disfrutar en la Victoria o Cortadura, ya se encarga ella de tener un pequeño reducto donde poder refugiarlos. ¿Dónde está ese lugar donde el levante te da cuartel y te deja disfrutar de un buen bañito? Pues en la playa de La Caleta.

Contar aquí las maravillas de esta playa sería repetirse pues, largo y tendido, se ha escrito sobre ella, sin embargo, no puedo dejar de contar sus maravillas y, a modo de resumen, diré que La Caleta es una playa histórica, ha visto en sus arenas huellas de fenicios, romanos, árabes y cristianos; es artística, está abrazada por dos castillos, uno del siglo XVI y otro del XVIII, y está coronada por el Balneario de la Palma del XX. Es también plató de cine, películas como "Muere otro día" de James Bond y "Alatriste", entre otras, se han rodado allí. Pero aún hay más, La Caleta es literaria, novelas de Galdós, de Quiñones, de Pérez Reverte, de Solís, entre otros muchos han escrito de ella, en ella y para ella. Podría seguir, pero lo último que diré es que La Caleta es sobre todo la playa de los gaditanos, especialmente de los que viven en el interior de sus murallas, es su lugar de encuentro en verano, es el tema de muchas de sus letras de carnaval, es, en definitiva parte de su vida. Si sopla el levante, un bañito en La Caleta es la mejor opción, y si no sopla, también. La Caleta es tu playa, no deberías pasar mucho tiempo sin disfrutarla.

No es un baño en La Caleta lo único que nos ha traído el levante este fin de semana. Volando, volando un sinfín de jóvenes vestidos de "dibujos animados" han tomado las calles del barrio, las tiendas y los supermercados. Salir a dar un paseo con Doraemon, con Robin, con Setsu o Mario Bross resulta sorprendente, pero más alucinante ha sido ir al "super" y encontrarse en los congelados con Pokemon, en la carnicería a Pikachu y en la caja con Nekomimi.

El "veranillo del membrillo" que estamos viviendo, nos deja la cabeza atolondrada por el levante, un buen baño en el caletero mar de Cádiz y una fantasía manga que pone color al calor de un otoño que quiere seguir siendo verano.

Hasta la próxima, suerte y bendiciones.

martes, 20 de septiembre de 2011

Acoger y dejarse acoger...


En mis años jóvenes conocí en la comunidad de Taizé, entre otras cosas, la máxima "acoger y dejarse acoger". Era muy jovencito y, hasta el momento, no había experimentado nada parecido. Fue, a partir de ahí, cuando aprendí a ponerle palabras a una práctica que, en mi comunidad parroquial, viviría muy intensamente en los años siguientes. Fines de semana, veranos y durante las Navidades y la Pascua, nuestra comunidad se abría a personas, especialmente jóvenes, y grupos que querían vivir su fe, un tiempo, entre nosotros. La experiencia siempre era enriquecedora. Se intercambiaban ideas, sentimientos, vidas... Descubríamos que había vida más allá de nuestras paredes, que había nuevas formas de creer, de celebrar, que los que venían nos ayudaban a crecer y avanzar. Acoger a otros es vivir la posibilidadad de "lo nuevo" día a día.

De forma simultánea tuve la experiencia de dejarme acoger. Tuve varias experiencias en las que el que visitaba y era acogido, era yo. Pude descubrir como los otros te trataban como ellos querían ser tratados, ofreciéndote su casa, su mesa, su ser. Sentirse atendido, cuidado, escuchado, aceptado.

Acoger y dejarse acoger puede ser un término muy amplio, puede englobar muchas situaciones en las que el sentido de la frase permanece inalterable. Reconozco que me siento más cómodo, siempre me ha pasado, en la primera parte de la frase. Acoger, regalar, invitar, acompañar, ayudar... ser sujeto activo de la acción con los demás. Aún me cuesta "dejarme acoger, invitar, acompañar...". Aún queda en mí parte del error de no dejar al otro ser acogedor..., de dejar al otro experimentar la dicha de entregarse y ser para el otro. Aún tengo que crecer, aún tengo tantas cosas que aprender.

En el camino de la vida que hemos recorrido, unas veces nos ha tocado acoger y otras ser acogido, en el camino de la vida que aún nos queda por recorrer abramos nuestras puertas al que viene y arriesguémonos a entrar en aquel que nos abre su casa, su corazón, su vida.

Hasta la próxima, suerte y bendiciones.

viernes, 9 de septiembre de 2011

El Garbanzo Negro


Cerca de mi trabajo, en la esquina de la calle Sacramento con Alcala Galiano, está "El Garbanzo Negro". Conocí ese bar por que me llegaron noticias de que allí se podía tomar a mediodía "vermuth de grifo" tal y como lo sirven en Madrid. Como un buen vermuth es siempre una invitación, nos acercamos un día y, desde entonces, como se dice por aquí "lo tenemos en nómina". De lunes a viernes, "El Garbanzo Negro" sirve unos menús del día muy ricos y de precios muy asequibles que combinan la comida tradicional con un toque de modernidad. El local es agradable y acogedor, tiene unas ocho o nueve mesas, una sencilla decoración y unos camareros amables y muy simpáticos.

A su dueño, José Carlos, lo conocí cuando ponía copas en el "M16" en el Paseo Marítimo de Cádiz. Era un local de cervezas y billar. Se escuchaba buena música y se pasaban allí unos ratos estupendos. Tras un tiempo sin vernos, me lo volví a encontrar tras la barra de "El Garbanzo Negro". José Carlos es de los que te hacen sentir en tu casa cuando atraviesas las puertas del local. No hacen falta más palabras para describirlo.

Este bar es el favorito de mis comidas de trabajo. Allí como cuando viene algún compañero de fuera de Cádiz o cuando quedo con algún amigo para almorzar en alguna ocasión especial. Si os tengo que recomendar algún plato en especial os diré que, de los primeros, el arroz negro está muy bueno, que los garbanzos (sin ninguno negro) con langostinos son exquisitos y que el cous-cous de pollo está para rabiar, por no hablar del salmorejo o de la berza gitana. De los segundos os recomendaría, bueno, de los segundos... no os hablo, esos platos mejor venís vosotros a probarlo.

A los amigos de "El Garbanzo Negro" les deseo mucha suerte con su negocio, estar día a día ahí, ofreciendo calidad no es fácil. Les agradezco los buenos momentos que nos han permitido disfrutar en su "casa". Este nuevo curso que empieza nos volveremos a ver de nuevo.

Hasta la próxima, suerte y bendiciones.

lunes, 5 de septiembre de 2011

Il lume vacilla al vento...


El mes de septiembre, como todos los años, nos trae la vuelta a la realidad. Aunque muchos han vuelto ya al trabajo, septiembre es ya, sin remisión, el fin del verano. En Cádiz, agosto se despidió entre truenos y relámpagos y parecía que el invierno había llegado de repente y, aunque el sol ha vuelto a reinar en el cielo, algo ha quedado que nos dice que esto se acaba. El curso escolar empezará en pocos días y eso, a los que tenemos hijos escolarizados, nos conduce a una rutina y disciplina que no acabará hasta el próximo junio.

Septiembre da paso a un otoño cuyo panorama lejos de ser esperanzador, invita más al pesimismo que a otra cosa. El otoño nos traerá un cambio en la Constitución marcado por las leyes del mercado, unas elecciones generales y, según los entendidos, un agravamiento de la crisis. Unos temen por la pérdida de sus empleos y otros no tienen ninguna esperanza de encontrarlo pronto. Los recortes sociales han empezado y, estoy convencido que los que más lo van a notar son los más débiles, por que lo que más se va a recortar serán los servicios sociales, la sanidad, la educación...

Cuando el futuro es gris y desesperanzador ¿dónde encontrar las fuerzas para seguir adelante? Dicen que las crisis nos hacen más fuertes, que nos permiten dejar lo superfluo y nos hacen valorar lo realmente lo imporante y fundamental. Sin embargo, hay muchos que no resisten el envite. Mientras, unos como el trigo están bien sujetos al suelo aunque el viento y la lluvia los agiten a un lado y otro, otros, sin piedad, verán su luz apagarse por el viento. En los tiempos que llegan, además de buscar las fuerzas para avanzar, habrá que compartirlas con otros.

No nos toca mirar hacia atrás, el pasado nos enseña a no repetir pero no nos salva del futuro. Septiembre, octubre, noviembre, no van a dejar de llegar por que pensemos en junio, julio y agosto. El tiempo es un aliado, un compañero de camino con el debemos llevarnos bien pero resistirse a su compañía es absurdo.

A todos los que leen este blog, les deseo un buen regreso tras las vacaciones, un buen otoño y mucho ánimo para afrontar todo aquello que nos traerán los próximos meses.

Hasta la próxima, suerte y bendiciones.

domingo, 21 de agosto de 2011

De cumpleaños, visitas papales y limpiezas...


La pasada semana este, vuestro blog, cumplió tres años de vida. Le pido públicamente perdón por no haberme acordado antes. Es como si a un padre se le olvida el cumpleaños de su hijo. Lo bueno de olvidarse del cumpleaños de tu blog y no del de tu hijo es que el blog no te lo tendrán en cuenta nunca. Tres años no son muchos, pero, teniendo en cuenta las cosas como están en el mundo de los blogs, me parece un "pequeño" triunfo. Aunque con retraso ¡felicidades!

Benedicto XVI ha pasado por Madrid en un baño de jóvenes multitudes. La visita ha provocado todo tipo de reacciones. A muchos católicos, que no a todos, la presencia del Papa, en las Jornadas Mundiales de la Juventud, le ha parecido un importante momento de fe. A unos cuantos menos católicos la visita, o más bien su financiación con fondos públicos, les ha parecido una inoportunidad y algo que se podía haber evitado. También ha habido muchos a los que la presencia de Benedicto XVI les ha dado exactamente igual. Al margen de los posicionamientos ante la visita, lo que sí es cierto es que a nadie ha dejado indiferente su presencia en Madrid y, quedarán para la historia estas Jornadas que tienen su próxima cita en la brasileña Río de Janeiro.

Mientras el Papa se despedía de unos y de otros, nosotros hemos aprovechado para hacer una buena limpieza de armarios. Ha salido de todo: apuntes de la universidad, facturas y más facturas, juegos de Antonio Juan de pequeñito, y un sin fin de tiestos defectuosos e inservibles que se habían hecho fuerte en los altillos. Ahora mis armarios están más vacíos y los contenedores de mi calle más llenos. Ponerse a hacer limpieza da pereza, pero una vez que te pones y terminas, se te queda el cuerpo más que a gusto y los armarios ni te lo cuento.

En fin, agosto va pasando entre cumpleaños olvidados, visitas papales y necesarias limpiezas. También la vuelta al trabajo, días de playa, encuentros con amigos y, después de unos días de convalecencia, mi reencuentro con la bicicleta.

Hasta la próxima, suerte y bendiciones.

miércoles, 10 de agosto de 2011

En el sur de Portugal...


Pasar la “frontera” hacia Portugal es como viajar en la máquina del tiempo y retroceder unos años con respecto a España. En Albufeira, centro turístico del sur portugués, las diferencias están más disimuladas, pero en los pueblecitos más apartados, todo se hace más evidente. Por capricho del azar he vuelto, en estos días, por tercera vez a Albufeira. Hace casi 20 años de la primera vez y la evolución es más que evidente. Se ha peatonalizado el centro urbano, se han mejorado los accesos a las playas, los aparcamientos se han regulado y, todo es más cómodo, organizado y ayuda considerablemente a una buena estancia.

Desde que en el siglo XVII Portugal dejara de ser española, tras unas décadas de anexión, los dos países han vivido casi de espaldas. Unos y otros, somos como hermanos que se llevan mal y, aunque deben entenderse, lo hacen a regañadientes. Los ingleses tienen más “presencia” en estas tierras. Históricamente han sido aliados y, muchos encuentran aquí su destino ideal para veranear. Todo está escrito en inglés, incluso, a veces, antes que en portugués. Luego lo podrás leer en francés, alemán y, si queda espacio en holandés o italiano. El castellano, bien es verdad que guarda gran similitud con el portugués, pero está obviado.

Están siendo días de descanso, de playa, de piscina, de paseos, de copas y helados. Si es esto lo que buscas el Algarve es un buen destino. Ahora, antes de volver al trabajo, unos días de “nada que hacer” sirven de estupendo colofón para las vacaciones de este año.

Da próxima vez a sorte e bênçãos ...

miércoles, 3 de agosto de 2011

Bicicletas londinenses y gaditanas...


Londres, mi tema estrella en estas últimas entradas, es una ciudad magnífica para recorrer en bicicleta. Aparte de sus famosos autobuses de dos plantas, el metro y sus negros taxis, la bicicleta se convierte en el aliado perfecto para ir y venir sin coste añadido. Las aceras y carreteras de Londres están señalizadas para facilitar la convivencia de los peatones y los vehículos a motor con la bicicleta. Si no tienes una en propiedad o estás de visita, puedes adquirir un bono-bici que permite usar la miles de bicicletas aparcadas en cualquier lugar de la ciudad. Es tan común el uso de la bicicleta que, en muchas viviendas, los vecinos prohiben que se "aparquen" delante de sus casas o amarradas a sus verjas. De la prohibición se deduce el exceso de la práctica, y del exceso de la práctica se confirma la gran existencia de bicicleteros por Londres.

No tuve la oportunidad de pasear en bici por Londres, así que me tengo que "conformar" con hacerlo aquí en Cádiz. La gran diferencia es que mi ciudad no está en absoluto preparada para convivir con las bicicletas. Los carriles-bici son escasos e irrisorios y nos obligan a circular por las aceras o por la carretera en la mayoría de los casos. En la pasada semana, por dos veces, he ido a dar con mis huesos contra el asfalto. De la primera, casi de milagro, salí indemne, pero de la segunda no he tenido tanta suerte.

Caerse de la bicicleta va implícito en el montarse sobre ella. Nadie está exento de tan corto y doloroso viaje, sin embargo, cuando la causa es por ser víctima de un conductor que "no te ve y se cuela en una rotonda" o "meter la rueda en unos raíles (Plaza de Sevilla) que son inservibles y que ya han provocado muchas caídas anteriores", entonces, a la frustración de la caída se une la indignación de la injusticia.

Pasear en bicicleta es siempre una buena opción. Sea en Londres o Cádiz, o donde tus sueños quieran llevarte, la bicicleta se hace uno con tu cuerpo y, es tan solidaria, que cuando caes al suelo, cae contigo, y si tienes la suerte de poder levantarte, ella vuelve a sostenerte para seguir camino juntos.

Pedaleando, hasta la próxima, luck and blessings...

lunes, 1 de agosto de 2011

El niño que vivió...


Acabamos de volver del cine de ver la última película de Harry Potter. Nos ha gustado a los tres y, como lector de los siete libros y espectador de las ocho películas, puedo decir que el final resulta un estupendo broche de oro a una saga tan mágica como literaria y cinematográfica. Vaya por delante la certeza que casi ningún libro está bien adaptado al cine, y que las obras de J.K. Rowling no iban a ser una excepción, pero, a pesar de eso, y salvo un par de películas, creo que la mayoría pueden aprobar.

El niño que vivió es, como todos os suponéis, Harry Potter, que misteriosamente sobrevive al ataque del mago tenebroso Lord Voldemort cuando era un bebé. El amor de su madre hace que el hechizo asesino no tenga efecto sobre él y, a partir de ahí, cuidado por parte de la comunidad mágica su vida transcurre preparándose para la batalla final. Entre una y otra, hay todo un universo, divertido a veces, dramático en otras, que ha encandilado a millones de personas en todo el mundo.

Harry Potter llegó a mi vida provocado por la curiosidad de saber por qué del éxito de sus libros allá por el año 2001. Leí el primero y luego el segundo, y así uno tras otro hasta el final. Luego vinieron las películas y por último, los juegos de la playstation en su versión Lego que he compartido con mi hijo. Él no se aficionó al niño mago hasta que lo conoció a través del juego de la PS3, luego ha ido viendo las películas y, ahora ha decidido comenzar a leer los libros. En cierto modo, hay una conexión entre Harry Potter y mi hijo. Ambos únicos, los dos son niños que "vivieron" cuando lo que todo presagiaba era que no lo hicieran. Sus madres los "encantaron" para que la vida no los dejara, para que siguieran adelante.

Hoy ha llegado el final. Bueno, no creo, ambos niños tienen aún mucha magia que hacer, especialmente, y no por que yo sea su padre, el mío.

Por último, y teniendo en cuenta que acabamos de volver de allí, nos ha hecho especial ilusión ver Londres en la gran pantalla, siendo sobrevolada por magos y escobas.

Untill next time, luck and blessings...

viernes, 29 de julio de 2011

Views of London...


En mi última entrada os decía que, además de las maletas, a los viajes también llevamos amigos en el corazón. Bueno, tengo que decir que, a las maletas y los amigos, hay que añadir una cámara de fotos al hombro. Tengo que reconocer que dejar constancia de nuestras idas y venidas por "esos mundos de Dios", aunque de forma moderada y no compulsiva, es un clásico irrenunciable.

No alargo esta entrada con palabras. Si queréis ver algunas fotos de nuestra estancia en Londres podéis pinchar aquí: Views of London.

Untill next time, luck and blessings...

PD: En la foto, periodistas gráficos cubriendo la comparecencia de James Cameron en el Parlamento por el caso Murdoch.

miércoles, 27 de julio de 2011

Amigos en San Martin in the Fields

Cuando viajamos, no solo llevamos maletas, también llevamos a nuestros amigos en el corazón y, de alguna manera o de otra, se hacen presentes en alguno de los lugares que visitamos.
Tenía claro qué quería ver en Londres. No podía dejar de contemplar la Abadía de Westminster, la "Venus del espejo" en la National Gallery, los mercadillos de Portobello Road y Camden Town y, especialmente, la iglesia de San Martin in the Fields en Trafalgar Square. Es en este lugar donde se hicieron presentes, en mi corazón, más amigos en Londres.
San Martin in the Fields es una iglesia construida a finales del siglo XVIII cuando aún no existía Trafalgar Square, lugar donde hoy podemos encontrarla. En ese tiempo, el paraje era un campo a las afueras de Londres, de ahí su nombre (San Martin "en los campos"). La actual parroquia es conocida en Londres por su labor humanitaria, dedica gran parte de su trabajo pastoral al cuidado de las personas sin hogar. Es famosa también por su dedicación a la música. Su acústica es fabulosa y, por esa razón, la Academia de San Martín in the Fields eligió este templo para celebrar allí, en el año 1959, su primer concierto público. En la actualidad, casi todos los días hay algún concierto entre sus muros. Por último, los londinenses le deben a San Martin in the Fields un agradecimiento por ser un centro de espiritualidad y silencio en medio del bullicio de Trafalgar Square y de Londres. Sus puertas siempre están abiertas desde que, durante la I Guerra Mundial, sus clérigos acogieran en ella a soldados y exiliados sin hogar retornados a Inglaterra.
Por la primera razón, el cuidado y atención a las personas sin hogar, recé. Por la segunda razón, la música, aparecieron Israel y Daniel, los "kapellmeister" de la Escolanía San Juan Bosco. Con Daniel, además de la música, tengo el gusto también de compartir la fe y por ello, siendo San Martin in the Fields un lugar de música y oración su presencia se hizo especialmente significativa. Quien no tuvo que hacerse presente fue mi amigo Juan Antonio por que estaba allí, junto a mí, disfrutando de tan maravillosa experiencia. Por el resto de los paisajes de Londres que fuimos visitando más amigos fueron apareciendo uno tras otro, especialmente mi amiga Elena, enamorada siempre de Londres y por ser mi primera guía virtual, una noche lluviosa, en una terraza de Madrid.
Cuando viajamos, no solo llevamos maletas, también llevamos a nuestros amigos en el corazón y, de alguna manera o de otra, se hacen presentes en algunos de los lugares que visitamos. Las maletas pesan, los amigos no y, cuando estamos lejos, sentirlos cerca completan eso que nos falta en el paisaje y que hace que todo sea perfecto.
Untill next time, luck and blessings...

lunes, 25 de julio de 2011

London is perfect...


Londres nos esperaba con los brazos abiertos pero con el cielo lleno de nubes. Desde el momento que aterrizamos la lluvia nos hizo de guía hasta el tercer día de nuestra estancia. Un poco incómoda, la lluvia en Londres es como el día al sol, así que, paraguas en mano, la incorporamos a nuestra visita como una atracción más.

La capital del Reino Unido de la Gran Bretaña no tiene comparación con ninguna de las ciudades que conozco pero, sin lugar a dudas, es una "city" con mayúsculas. La he encontrado fantástica. Confieso que me rendí a ella mucho antes de llegar, pero no imaginaba que me iba a encontrar tan cómodo, tan a gusto y tan integrado. Me han gustado sus calles, sus plazas, sus edificios, sus iglesias, en definitiva, me ha gustado todo, al menos lo que he tenido la oportunidad de conocer y visitar. Supongo que, como todas las ciudades de mundo, Londres tendrá sus zonas oscuras y grises, pero yo, en esta ocasión, no las he visto.

Mis nociones de inglés son muy básicas, y tenía serias dudas de cómo hacerme entender y como comprender en inglés. El primer encuentro no fue muy satisfactorio, no me enteré de nada, pero la segunda vez ya no salí tan dañado como la primera y el don de lenguas empezó a despertar. Es cierto que con las palabras “sorry” y “thank you” ya tienes gran parte ganado, pero hemos tenido que aprender más para poder salir airosos. ¡Qué verdad es que la necesidad agudiza el ingenio! En dos días ya sabíamos cómo se pedían las cosas, los precios y como preguntar cómo ir a un lugar que nos interesara. Y os tengo que confesar que ahora que he vuelto me hubiera quedado más tiempo para seguir aprendiendo inglés.

Samuel Johnson (1709-1785), para algunos la segunda figura literaria británica más importante después de Shakespeare, dejó escrito "when a man is tired of London he is tired of the life; for there is in London all that Live can afford..." (cuando un hombre está cansado de Londres, está cansado de la vida, pues allí se encuentra todo lo que la vida puede ofrecer). Tres siglos después, doy fe de que la frase sigue vigente o más si cabe. Museos, teatros, parques, monumentos, pubs, mercadillos… Londres ofrece al visitante y, por supuesto, al londinense, una gama tan amplia de posibilidades que la ciudad se convierte en una ciudad multicultural y cosmopolita, pues allí confluyen millones de personas a lo largo del año llegadas de todos los rincones del globo.

No soy capaz de resumir nuestra semana en Londres. Es mucho Londres para tan poco blog. Próximas entradas contarán más de esta estupenda e interesante experiencia.

Untill next time, luck and blessings…

lunes, 18 de julio de 2011

Esperanzas...

Cuando hace cuatro años, la crisis empezó a golpear a miles de personas y familias, muchos pensaron que ésta pasaría pronto y que no les tocaría a ellos. Sin embargo, lejos de ser una situación pasajera, la crisis se ha ido agudizando mes tras mes, año tras año, y, según los últimos análisis de unos y de otros, vamos a permanecer así o incluso peor, durante un largo tiempo .
La crisis o más bien sus consecuencias, han empezado a sentirse en nuestro entorno más cercano. Las cifras, antes impersonales, ahora tienen nombre y rostro. Tu hermano o tu hijo han recibido un NO cuando han ido a pedir la hipoteca para comprar su piso, a tu madre o tu sobrino no le han renovado el contrato y vuelven a estar en paro una vez más, a tu vecino lo acaban de embargar y tendrá que dejar la casa que tanto le costó conseguir... Ya no son cifras anónimas, son personas como tú o como yo a los que la crisis les está dejando sin nada. Es cierto que quedarse sin nada material es una tragedia y verse abocado a pedir ayuda cuando uno antes era suficiente y autónomo es muy duro y muy difícil. Pasar de tener trabajo y la vida resuelta a encontrarse en la cola de los Servicios Sociales o en la puerta de Cáritas solicitando ayuda para pagar la hipoteca o alimentos para la familia es una tragedia que muchos no superan, pero, tristemente, es la única salida que les está quedando a muchas personas y familias de este país.
Sin embargo, además de triturar literalmente a muchos, la crisis está dejando sin esperanza a casi todos y, sin esperanza, la crisis ha ganado la batalla. En la lucha contra la crisis, además de solidarizarnos con los que sufren sus consecuencias, hemos de permanecer firmes en la esperanza de que podemos hacer algo más que lamentarnos. Pandora dejó escapar mal tras mal antes de dejar ver la esperanza al fondo de su caja. La caja de la crisis está tiñéndolo todo de un color gris cenizo que empieza a calar tan hondo en nuestras almas que todo se está volviendo muy triste. Pero no podemos cejar, si perdemos la esperanza estamos más que perdidos.
Al fondo de la caja, la esperanza aguarda a que renovemos nuestra fe en ella y nos pongamos de nuevo en camino para seguir adelante. Hay que seguir creyendo que podemos hacer algo más para que nuestra vida tome un rumbo nuevo y que, si hay que pedir ayuda se pide, y que si nos la piden a nosotros, tenemos que darla, incluso debemos ofrecerla antes que nos la pidan. Solo pidiendo y dando podremos seguir hacia adelante.
No cejemos, resistamos, no le demos a la crisis la satisfacción de vernos vencidos. Resistir en la esperanza de que esto cambiará y saldremos adelante.
Hasta la próxima, suerte y bendiciones.

sábado, 9 de julio de 2011

El hombre menguante...


Cuando tenía unos veinticinco años, más o menos, en una analítica de sangre rutinaria, me detectaron el colesterol alto, más alto de lo conveniente en una persona de mi edad. Mi médico de cabecera me recetó pastillas, dieta y ejercicio físico. No era una tragedia, pero recuerdo que en ese momento tomé conciencia que somos perecederos, que la salud es lo más preciado que tenemos y que no nos damos cuenta de que la tenemos, hasta que no la perdemos, aunque sea un poco. Desde entonces, he vivido con el colesterol como un compañero de camino bastante incordiante por que rara vez, en los últimos veinte años, ha estado en sus niveles normales y, cada vez que como algo que no debiera un "pepito grillo" me recuerda que lo puedo tomar pero no debería hacerlo.

Hace un año y medio, tras la típica analítica de cada seis meses, y con un resultado muy cercano al límite normal, mi médico de familia decidió suspenderme el tratamiento de simvastatina habitual y me indicó que intensificara la dieta y el ejercicio físico. A mis cuarenta y dos años, dejarme sin el único remedio a mi colesterol, y con la sombra de las enfermedades cardíacas rondándome la cabeza, me dejó un poco preocupado y me volví muy obediente en el tema de la dieta y el ejercicio. Y así, comenzó mi descenso de peso a un ritmo muy animado. Pasé de los ochenta kilos a los sesenta y ocho que peso ahora. El colesterol no tiene síntomas, es invisible, pero mi delgadez ha sido, al parecer, más que evidente. En todos estos meses he estado escuchando, "qué delgado te estás quedando", ¿qué estás haciendo?, ¿estás enfermo?, "no adelgaces más que estás muy feo". Es evidente, que opinar en gratis y, en este país, además, casi un deporte nacional.

Toda la ropa se me quedó grande, dos tallas he dejado atrás. He recuperado prendas que dormían el sueño de los justos al final del armario y otras han llegado nuevas directamente desde los estantes de la letra S y la letra M. Atrás ha quedado la XL y la ropa con diseño de hombre jubilado. Este cambio de tallas me ha venido bien para modernizar y "juvenalizar" un poco la imagen, aunque esto también ha dado lugar a otras corrientes de opinión entre mis amigos y compañeros...

En fin, que he ido menguando en tamaño a la vez que crecía en años. Hace un par de días, he vuelto a recoger los resultados de la última analítica y, la historia se vuelve a repetir, tras seis meses de pastillas, el nivel de colesterol vuelve a estar en el límite de los parámetros normales, así que mi médico de familia ha vuelto a recitar las palabras reductoras "descansemos de las pastillas y reforcemos la dieta y el ejercicio". Confío en haber tocado fondo en la pérdida de peso y sólo se mantenga a raya al colesterol. No me apetece nada tener que comprarme ropa nueva y menos en la sección infantil y, aún menos me apetece tener que seguir dando explicaciones y escuchando opiniones.

Por cierto, después de 17 años me he vuelto a dejar la barba crecer. Está más canosa que antaño pero sirve igual para que los comentarios sobre mi físico se desvíen hacia otro lugar.

Hasta la próxima, suerte y bendiciones.

jueves, 30 de junio de 2011

De calores, veranos y viajes...


El verano se ha instalado en Cádiz, al igual que en el resto de España, de manera brutal. El viento de levante y las temperaturas que rondan los 35º nos han sumido en terrible estado de pesadez. Los que ya están de vacaciones pueden intentar burlar el calor con baños en la playa, los que aún debemos ir a trabajar debemos someternos a la tiranía del calor.

Sin embargo, el verano trae también para muchos la posibilidad de escapar a otras latitudes, marchar a otros mundos, que como decía el poeta francés Paul Éluard, están en éste. El año pasado migré de "Esparta a Atenas", pero el calor se vino con nosotros, o mejor dicho, nos esperaba allí. Este año vamos a intentar burlarlo huyendo hacia el norte, en concreto nos vamos, junto a unos amigos, a Londres. Para nosotros es una verdadera aventura. A nuestro hijo le hace una ilusión bárbara, aunque a su madre y a mí, el hablar más "gibraltareño" que inglés, nos hace estar en cierta tensión. Pero me da igual, no voy a esperar a hablar correctamente el idioma de los hijos de la Gran Bretaña para intentar "conquistar" a la pérfida Albión.

Otros destinos han elegido el resto de nuestros amigos, unos prefieren lugares más cercanos, más nacionales, otros han preferido acercarse a Italia y otros han elegido París. Ah, París, de buena gana les hubiera acompañado. Siempre que alguno de mis amigos va a la ciudad de las luces vuelven a mí la ganas de volver. No debería dejar pasar más tiempo para recordar sus calles, sus plazas, sus puentes, sus iglesias. París es siempre una fantástica opción.

En fin, buen viaje, buenas vacaciones y buen verano a todos. No olvidéis que el verano es un tiempo lleno de oportunidades y posibilidades.

Hasta la próxima, suerte y bendiciones.

jueves, 23 de junio de 2011

San Juan y su noche...


No voy a descubrir en esta entrada nada nuevo relativo a la "noche de San Juan". Todos sabemos que el fuego es el auténtico protagonista de esta noche, en la que medio mundo celebra la llegada del verano con ritos múltiples y variados. En Cádiz, la tarde-noche transcurre entre la quema de los "juanillos" y los baños "rituales" en La Caleta. Los "juanillos" son muñecos que parodian la realidad al estilo de las coplas del Carnaval. Su origen está en las cosas viejas que se quemaban esta noche y que apiladas en la calle o en las plazas formaban figuras que se vinieron a llamar "juanillos" por ser la víspera de San Juan.

Al son de la famosa canción popular "tira el juanillo por el patinillo, tira a tu hermana por la ventana..." esta noche arden en Cádiz los personajes más famosos de la actualidad local y nacional. En el que he ido a ver con mi hijo, ardían la alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez (como no podía ser de otra forma) que pilotaba el helicóptero desde el que se tiran los participantes del concurso "Supervivientes". Con ellos ha ardido el hijo de la Pantoja, un pulpo, varias palmeras y un par de cocos. Toda una buena hoguera (sobre todo por la "telebasura" que ha quemado).

La noche continuará iluminada por las hogueras. Fiestas, canciones y bailes en la playa, en las plazas, darán la bienvenida multitudinaria al verano. El fuego lo quemará todo. Lo purificará todo y dará paso a un tiempo de verano nuevo y lleno de posibilidades. Un tiempo de descanso, de viajes, de planes, de esperas, de encuentros. Un tiempo para lo que quieras.

Aprovecho esta entrada para felicitar a todos los "juanes" que forman parte de mi vida, especialmente a Juan Martín Baro, a "my very best friend" Juan Antonio y a su hijo Juanito.

Hasta la próxima, suerte y bendiciones.

lunes, 20 de junio de 2011

Tres tomos y un apéndice....


En muchos días del año se concentran varias celebraciones o conmemoraciones bien a nivel local, provincial, nacional, europeo... Algunos nos tocan directamente y de otros, ni siquiera nos enteramos. Hay días para todos. Día del Medio Ambiente, de los Océanos, del Padre y de la Madre, de la Lucha contra el Cáncer, de la Erradicación de la Pobreza, del Orgullo Gay, de los Refugiados, de la Mujer, del Libro..., días para todos y para todas.

El 21 de junio tiene también su celebración, bueno sus celebraciones por que, que yo sepa, no tiene una o dos, si no hasta tres celebraciones. Los "luises" y las "luisas" celebran a Luis Gonzaga, santo italiano, noble y jesuita que con el tiempo se convirtió en el patrón de la juventud cristiana. Se celebra también el comienzo del verano, este año justo a las 19'16 horas el verano se instalará oficialmente en nuestras vidas, aunque por el calor parece que ya lo hizo hace unas semanas. Es también, el 21 de junio, el Día de la Música, que es una celebración estupenda. La música es siempre un buen motivo para celebrar. Por todos los beneficios que tiene no debería celebrarse un solo día al año, si no muchos más. En fin, que quien no encuentra un motivo o dos o tres, para que el 21 de junio se convierta en toda una fiesta, es que no tiene sangre en las venas. De las tres coincidencias podríamos seguir escribiendo hasta completar un tomo enorme, pero me conformo con enunciarlas, que cada uno complete el resto.

Yo, además tengo una cuarta razón, que como es más particular y no tan universal como las anteriores es solo un apéndice. Me refiero a que un 21 de junio tuve la gran suerte de casarme con la que aún hoy sigue siendo mi santa esposa. Ya escribí de eso en este blog, (Hace justo doce años) hace un par de años así que no me extiendo. Lo único que vuelvo a decir es que no me he arrepentido ni una vez de haberlo hecho y si volviera al pasado, lo volvería a hacer. Algunos amigos piensan que lo mejor que Inés hizo por mí fue "recogerme". Yo también lo creo.

En fin, amigos, a los Luises y Luisas, muchas felicidades y a los que la música les da la vida y a los que el verano les sienta muy bien, que lo celebren con alegría, pues, cualquier momento es bueno para desearse felicidad.

Hasta la próxima, suerte y bendiciones.

jueves, 9 de junio de 2011

Cogito ergo curo...


El verbo cuidar proviene del latín "cogitare" que se traduce al castellano como "pensar". Cuidar y pensar, curiosa pareja. La RAE lo define entre otras cinco acepciones como "poner diligencia, atención y solicitud en la ejecución de algo". Cuidar y pensar. Pensar en el otro y poner los cinco sentidos para procurar su bienestar.

Cuando venimos a este mundo somos inmediatamente, en la mayoría de los casos, cuidados por nuestra madre y nuestro padre, por el personal sanitario, por el resto de la familia, especialmente las abuelas. Cuando vamos creciendo se incorpora a nuestro cuidado, de forma extensa el Estado, articulando una serie de mecanismos públicos (sanidad, educación, cultura, seguridad...) que aporta, generalmente, que nuestro bienestar se vaya incrementando y consolidando. Todos estos servicios destinados al cuidado de los ciudadanos son visibles, son evidentes. Sin embargo, existen aquellos que nos cuidan sin que nosotros lo sepamos, son todos los que viven bajo el lema de "pienso, luego cuido" (cogito ergo curo). Son personas anónimas que piensan en ti y hacen que nuestra vida sea más agradable, más feliz. Lo hacen con discreción, en la sombra, no buscan ser reconocidos, sólo ansían tu bien y tu felicidad.

El compañero que riega tus plantas para que siempre las veas verdes, o que no pide las vacaciones en el mismo turno para que puedas disfrutarlas tú, el vecino que no usa los mejores cordeles para que los encuentres libres al tender la ropa en la azotea, el amigo que deja siempre la mejor croqueta en el bar para que te la comas tú... Estos son ejemplos pequeños, que no por eso dejan de alegrarte la vida, pero seguro que cada uno de vosotros podéis encontrar otras situaciones que habéis vivido en primera persona.

Pensar y cuidar, dos verbos que aunque parecen alejados conviven en una misma realidad: la de querer hacerle la vida agradable a los demás.

Hasta la próxima, suerte y bendiciones.

martes, 31 de mayo de 2011

El videoclub de mi calle...


Nací en la calle Torre de Cádiz en una casa que ya no existe. La antigüedad, la dejadez de los vecinos y la casera, trajo la ruina al inmueble que terminó, hace unos años, desplomándose planta sobre planta. Para entonces, mi familia ya se había mudado a la calle Cruz Roja Española y allí viví hasta que treinta años después me mudé tras casarme. Varios años después, volví al barrio en el que me crié, aunque a un par de calles de distancia. No había cambiado sustancialmente, los mismos vecinos, los mismos edificios, los mismos arbolitos, los mismos negocios.

No ha sido nunca la calle Cruz Roja Española una calle comercial, sólo tres o cuatro negocios están instalados allí actualmente, dos de ellos son los veteranos. Uno es Electricidad Lora que está dirigido y atendido por la familia que le da nombre al negocio. Ha cambiado de local un par de veces pero siempre en la misma calle y así, año tras año, es el lugar donde propios y extraños compran todo lo relacionado con la electricidad del hogar. El otro es la peluquería de Manolo. Este negocio siempre ha estado ahí, junto al portal número 11 de la calle. Allí me pelé durante años. Manolo me peló antes de irme a la "mili" para que no me hicieran un estropicio en el cuartel y él me cortó el pelo para ir arreglado a mi boda. Manolo es un clásico de la calle y del barrio.

El último en llegar al barrio y quedarse ha sido el Videoclub Gilda. Este negocio es una apuesta personal de su dueño por acercar el cine al barrio. Hubo otro videoclub en el entorno pero, en ese caso, se alquilaban películas simplemente. En Gilda se ama al cine y eso se nota en el trato que el cliente recibe cuando entra por la puerta. En estos tiempos que corren en el que los negocios cierran por la crisis, Gilda se mantiene a flote por que hay una atención personalizada, por que cuando vas buscando una película, Ángel, su dueño, te cuenta y te recomienda lo que puede y no puede gustarte por que te conoce. Gilda se mantiene a flote por que Ángel cuida el negocio ideando semana tras semana, mes tras mes, fórmulas que atraen a los clientes con iniciativas creativas entorno al cine. En Navidad, promoción de películas infantiles y navideñas, cuando llegan los Goyas o los Oscars, nuevas promociones, bonos para fidelizar los alquileres... y muchas ideas más. Una de sus apuestas originales es que Gilda ofrece una muestra de cine clásico, en el que como no podría ser de otra forma, la película Gilda, que protagonizó Glenn Ford y la fabulosa Rita Hayworth, está incluida. Por supuesto, Gilda tiene su web, tiene su perfil en Facebook, y también su blog. Gilda lucha día tras días por seguir ahí. Desde aquí nuestro apoyo y nuestra enhorabuena por su apuesta por el cine y por el barrio. Os dejo su web para que conozcáis el amplio catálogo que ofrecen a todos los que por allí se acercan www.videoclubgilda.com

Hasta la próxima, suerte y bendiciones.


martes, 10 de mayo de 2011

Mermeladas compulsivas...


No soy lo que se llama un "cocinitas" pero, de vez en cuando, me meto en la cocina y, con la ayuda, eso sí, de la "thermomix", hago algo de comer. A veces está bueno y a veces no lo está, pero como hay paladares para todos los gustos, pues... Un tiempo me dió por los bizcochos. Los hacía para merendar en casa, para desayunar en el trabajo, de naranja, de limón, de manzana, para celebrar un cumpleaños y para lo que fuera, daba igual, yo hacía bizcochos. Otro tiempo me dió por los patés. Paté de palitos de cangrejo, paté de atún, de jamón, de avíos del puchero... Sin embargo, ahora me ha dado por las mermeladas. Y como estoy en plena fiebre de la mermelada a toda costa, también mi blog tiene que probarlas. Mi amiga Leti dice que mi amiga Pili dice, cariñosamente, que hacer estas cosas es ser un TOC (Trastorno Obsesivo Compulsivo). A mí me da igual lo que digan, me han dicho ya tantas cosas que, ser un TOC si mis frutos son ricos y sabrosos, tampoco está tan mal.

Hasta la fecha, he hecho mermelada de pimiento rojo, de zanahoria, de tomate y de berenjena. He tuneado las recetas anteriores, y a la de pimiento rojo le añadí vermuth rojo, a la de berenjena le añadí nuez moscada y a la de zanahoria le he añadido jengibre y coñac. La hemos probado con queso, anchoas, bacon, jamón y la mezcla es interesante. Tengo que reconocer que ninguna receta es fruto de mi creatividad, salvo el "tuneo" de andar por casa, más bien fruto de búsquedas en "google" y de plagio en tiendas de "delicateses", pero mis amigos a los que regalo un bote dicen que todas están muy ricas, así que, aunque copiadas, superan la prueba. La próxima mermelada que se "avecina" es o de cebolla o de pepino. No tengo muy claro a qué sabrán (bueno seguro que a pepino o a cebolla), aunque quizás puede que, en este caso, sea a demonios ¡ya las probaremos!

En realidad, lo que más me gusta de estos pequeños manjares es, más que hacerlos, regalarlos: un bote para mi mujer y el resto para los amigos, sufridas víctimas de mis compulsiones. Hasta el momento, ninguno me ha demandado por envenenamiento casero, así que, lejos de abandonar, perseveraré en el arte de mezclar cualquier cosa con azúcar, un limón y una zanahoria. ¿Alguna sugerencia para próximas compulsiones?

Hasta la próxima, suerte y dulces bendiciones.

martes, 3 de mayo de 2011

Mayo y sus flores...


Mayo no ha hecho más que empezar y ya podemos ver y oler sus flores. Para unos serán rosas y margaritas, para otros crisantemos y cardos. ¡Quién sabe lo que nos traerá mayo con sus flores!

Por ahora, ya hemos olido la flor del día de la madre, del día del trabajo y sus 5 millones de parados, la de Bin Laden y su partida de este mundo, la de niños vestidos de Primera Comunión, de madres nerviosas y catequistas alteradas, de padres emocionados y de niños encantados.

Pero quedan más flores por venir, flores de volantes y ferias, flores de elecciones y sobresaltos, de exámenes y verbenas, de ganas de vacaciones y de más exámenes, flores de planes y de viajes...

¡Mayo y sus flores que no dejan a nadie impasible! En realidad es la última etapa antes del mes de las vacaciones ¡pobre mayo! tan lleno de flores y de reacciones tan "alérgicas", ¡pobre mayo! que lo queremos disfrutar y que luego se nos hace tan largo, ¡pobre mayo!

En el jarrón que somos cada uno de nosotros pondremos nuestras flores y otros también vendrán a poner las suyas, al final, hasta puede que quede bonito.

Hasta la próxima, suerte y floridas bendiciones...

sábado, 23 de abril de 2011

En un huerto en Jerusalén...


Jesús ha muerto en la cruz. La aventura profética encaminada a instaurar el Reino de Dios ha terminado en el gólgota. Los sumos sacerdotes han encargado a la guardia que custodie el sepulcro de Jesús. No quieren sorpresas y han sellado el sepulcro con una pesada losa para ratificar que el problema de Jesús ha pasado a la historia. El poder ha vencido y un gran silencio cubre toda la tierra.

Sin embargo, algo ocurre en la mañana de Pascua. Unas mujeres han sobresaltado a los discípulos con la noticia de que cuando han ido al huerto donde enterraron a Jesús para terminar de embalsamar el cadáver, lo han encontrado vacío. Entonces, ¿dónde está Jesús? No lo saben, pero no aquí, no entre los muertos. Ya lo había anunciado de antemano. Dios no permitiría que su planteamiento de vida para la humanidad acabara en la tarde del Viernes Santo. El Dios de Jesús es un Dios de vivos y, aunque nos empeñemos en buscar a Jesús entre los muertos, sólo lo vamos a encontrar caminando hacia la vida.

Jesús fue enterrado en un huerto, en un jardín. No es un lugar de muerte y oscuridad sino de luz y vida. El lugar de su enterramiento ya nos estaba dando un aviso, ahora es ya un certeza. Jesús vive y va por delante de nosotros a Galilea. Como cristianos estamos llamados a compartir con Jesús su vida definitiva. Pero, ¿qué significa compartir la vida con Jesús? Pues nada más y nada menos que compartir con Él su misión y su destino, compartir con Él su estilo de vida y discurrir por la vida con sus mismos sentimientos.

La Resurrección de Jesús no es un acto mágico en el que un muerto vuelve a la vida. La Resurrección de Jesús va más allá de las leyes humanas. Es la validación, por parte de Dios, de que todo lo que Jesús nos ha enseñado con su palabra y con sus gestos liberadores. Es la palabra definitiva de Dios sobre Jesús. Es el gran mensaje de la liberación humana y, es también la forma más clara de decirnos que debemos buscar la vida con mayúsculas en todo lo que hagamos.

En el huerto donde Jesús fue enterrado comenzó una nueva etapa para todos, una nueva esperanza que renovamos año tras año en la noche de la Pascua. A todos los lectores de "Dímelo en el Blog" Feliz Pascua 2011.

Hasta la próxima, suerte y bendiciones.

jueves, 21 de abril de 2011

Jueves Santo en Jerusalén


Jesús vuelve a Jerusalén para cenar con sus discípulos, tras la cena, su última cena con ellos, Jesús sale hacia el monte de los olivos. Por el camino, Jesús les advierte que la situación es delicada y que es muy posible que las autoridades judías lo busquen para matarlo, aunque les consuela afirmando que no es el final, que volverán a encontrarse en Galilea, donde todo empezó. Los discípulos manifiestan, especialmente Pedro, que ellos le seguirán hasta donde vaya y si hace falta morirán con Él.

Llegan a Getsemaní. Jesús tiene, aún, la oportunidad de abandonar, sin embargo, ora para conservar las fuerzas y la coherencia. Los discípulos, los que iban a seguirlo hasta el final, se han quedado dormidos. Ellos no oran y, por tanto, han perdido las fuerzas del seguimiento a Jesús. Ante la primera amenaza, Judas y los guardias han llegado al huerto, los discípulos se dispersan y huyen, dejando a Jesús solo a su suerte. Una palabra impresiona en la escena del prendimiento en el huerto. Jesús llama a Judas "amigo". A pesar de todo, Jesús no abandona la idea de recuperar al que lo traiciona. Es una muestra más de amor. Aún lo considera amigo, no es Jesús del "ojo por ojo", sino el amor incluso al "enemigo".

Jesús es detenido y llevado al Palacio de Sumo Sacerdote, es el lugar del poder religioso. Los que custodian y velan por la religión buscan una razón para matarle. Jesús ha cuestionado desde el principio al poder religioso, y desde que está en Jerusalén, su contraposición ha sido permanente y determinante. La pregunta de Caifás es: ¿Eres tú el Hijo de Dios? A su afirmación, el Sanedrín se escandaliza, se burla y condena. Esta realidad es terrible. Jesús morirá en nombre de Dios a manos de sus representantes en la tierra.

En otro plano está Pedro. Aún permanece junto a Jesús, sin embargo, una criada, en el patio del palacio, lo reconoce y le increpa que también él pertenece al grupo de sus seguidores. Pedro niega a Jesús y lo abandona definitivamente. A partir de ahora, Jesús está solo, sólo unas mujeres, esas que lo acompañan desde Galilea, le seguirán hasta la cruz y el sepulcro. Luego, habrá que esperar y confiar en la promesa de Jesús volverá.

Confiemos y esperemos en el huerto donde será colocado en la tarde del Viernes Santo.

Hasta la próxima, suerte y bendiciones.

lunes, 18 de abril de 2011

Lunes en Jerusalén


Jesús pasó el Domingo de Ramos en la ciudad de Jerusalén. Tras entrar montado en un pollino y ser aclamado como Rey de paz, Jesús se fue al Templo. Según Marcos, lo observó todo y salió hacia Betania. Al día siguiente, Jesús vuelve a la ciudad. Dice el texto que sintió hambre y que se acercó a una higuera para comer sus higos, pero sólo encontró hojas. Ante esta contradición consistente en que, en una higuera, si es el tiempo, debe tener higos y no solo hojas, Jesús predice que ya esa higuera nunca dará a nadie de comer. Este relato, de carácter simbólico, nos vienen a decir que Jesús se refiere al Templo de Jerusalén, a la religión oficial que ofrece una frondosidad (hojas) engañosa, estéril. El judaísmo inmisericorde, fundamentado en el culto en el Templo, no ha sabido salvar al pueblo. La antigua Alianza está acabada. Su tiempo ha terminado, su papel en la historia de Israel termina.

Al llegar a Jerusalén, en la mañana del lunes y entrar en el Templo, Jesús adopta una actitud a la que no nos tiene acostumbrados: expulsa a los mercaderes del recinto en un acto de defensa de Dios y de los pobres. La iconografía ha presentado a un Jesús colérico, sin embargo, y sin quitarle dramatismo a la escena y profundidad a la reivindicación, el gesto de Jesús no creo que fuera violento, sino más bien firme y coherente. Independientemente del evangelista que lo cuente, Jesús se niega a aceptar que a Dios se le convierta en un instrumento de lucro económico por parte de los sacerdotes a los que se les había encomendado la custodia de la fe de Israel. Los sacrificios eran la vía de relación con Dios. Los animales eran propiedad de los sacerdotes y había que pagar por ellos. Jesús no puede consentir que su Padre sea alejado de su pueblo por una panda de "bandidos". Los pobres no tienen dinero, no pueden comprar animales, y por tanto Dios queda fuera de su alcance. ¿Hay mayor vileza que alejar a los pobres de su Padre y a Dios de sus hijos más queridos? De ahí, la decisión de Jesús, de acabar con este "negocio" en el que se ha convertido la religión de Israel.

Los sumos sacerdotes y los estudiosos de la Ley no pueden soportar esto y buscaban la manera de matarle. Jesús es un peligro que debemos detener. El "lunes santo" termina con Jesús saliendo de la ciudad. Vuelve a Betania, posiblemente a casa de Marta y María. Sin embargo, un día tras otro, vuelve a Jerusalén. Es el momento de confrontar a los dirigentes. Jesús no rehuye su destino. Ha venido a Jerusalén a llevar a término su misión, aún a sabiendas que lo que la primavera galilea se torna crudo invierno.

Nos volveremos a encontrar con Jesús el "jueves santo" cuando, con sus discípulos, se reúnan para celebrar su cena de despedida.

Hasta la próxima, suerte y bendiciones.

domingo, 17 de abril de 2011

En camino hacia Jerusalén


Dos procesiones tienen lugar en Jerusalén en los días que Jesús llegó con sus discípulos a celebrar la Pascua. La primera la que protagoniza anualmente el poder imperial, la segunda la del propio Jesús de Nazaret, el hombre que pasó por la vida haciendo el bien y que, días más tarde de su llegada, sería asesinado en una cruz. Dos procesiones que se contraponen y que trascurren de forma paralela en aquellos días y en los actuales.

Desde el año 64 a.C., Roma dominaba Palestina de forma directa o indirecta a través de dirigentes vasallos. En tiempos de Jesús, Judea estaba bajo la jurisdicción directa del Procurador romano que no vivía durante el año en la ciudad sino que acudía a ella, desde Cesárea del Mar, sólo cuando la situación política se volvía tensa y ésto sucedía especialmente en los días de la Pascua.

De esta forma, Poncio Pilatos, el Procurador que gobierna Jerusalén, parte de su residencia en la costa para acudir a la fiesta de la Pascua. Su procesión es la del poder, de la opresión y el dominio. Montado en su caballo, animal que representa la fuerza, rodeado de sus soldados y al son de trompetas, recorre la costa hasta llegar a Jerusalén y acceder a su palacio situado en la Torre Antonia, fortaleza anexa al Templo de Jerusalén y desde la que domina la ciudad.

Mientras, Jesús de Nazaret, ha enviado a sus discípulos a buscar un pollino, representación de la mansedumbre. A su entrada, el pueblo, agita, en señal de bienvenida, ramas de olivo, símbolo de la paz, de la no violencia, es la opción por lo sencillo, lo humilde.

En los siguientes días, a Roma le tocará decidir sobre el futuro de Jesús y lo hará en consonancia a su estilo de procesión. El poder, la fuerza, la violencia caerán sobre Jesús con toda su contundencia.

Al igual que en Jerusalén en el año 30 d.C., en nuestros días, hay muchas procesiones recorriendo nuestras ciudades y pueblos. Unas desde la violencia y el mal y otras desde la paz y la bondad. Son dos formas de entender la vida. Son dos formas de recorrer la vida. ¿A qué procesión te sumas? ¿A qué personaje saldrás a recibir a las puertas de Jerusalén?

Hasta la próxima, suerte y bendiciones.